[Privado | Kasha Dien & Haruka | Curiosity can be dangerous]

Relamía sus bigotes en la tranquilidad que proporcionaba el techo de aquel edificio abandonado, hace ya un par de semanas que se sentía muy cómoda allí, tanto que a veces olvidaba volver a casa, la ciudad se había vuelto ligeramente aburrida y la actividad humana le parecía cada vez más común, no había nada en ellos que fuese interesante o intrigante, era todos copias de copias de copias, no había nada en ellos que fuese remotamente original y ya estaba cansada de tener las mismas conversaciones una y otra ves, es por eso que prefería buscar lugares como en el que ahora se encontraba, lugares a los que muy pocos humanos pudiesen acceder, de hecho hoy sólo había encontrado a un humano en el lugar y ese  humano había terminado rápidamente asesinado por un vampiro, tal vez fue por eso que a penas vio a una chica de cabellos rubios le causó una gran curiosidad.

Utilizó una combinación entre Onineko para volverse invisible e indetectable y Bajutsune para llegar flotando junto a ella, por un buen rato la siguió hasta que entraron a una sala de operaciones, pero realmente comenzaba a aburrirse, la chica rubia era realmente silenciosa y cuidadosa, no había forma de que otra criatura captara su presencia a no ser que la hubiesen visto.- Hola ¿Qué haces aquí? -Preguntó sin revelar su identidad aún.- Es extraño ver a una chica sola en este lugar, es mmm ¿Cómo dicen los humanos? ¿Peligroso? -Aún hablaba desde la comodidad que le proporcionaba la invisibilidad.

Observó detenidamente cada uno de los rasgos de la chica, su cabello, su estatura, su color de ojos y contó una a una las pequeñas líneas que se dibujaban sobre su rostro, era un rostro muy simétrico por lo que no costaba mucho intentan duplicarlo si eso era lo que deseaba, aunque no estaba convencida de esos ojos, los ojos claros al igual que el cabello claro eran producidos por una falta de pigmentación, pero más allá de eso, le parecían tan frágiles.- ¿Los fantasmas no deberían tener olor? -Dijo para luego reír de forma divertida.- Supongo que eso lo sabes porque has conocido muchos fantasmas, aunque te sorprendería saber que hay algunos espíritus que si tienen olor, por ejemplo los demonios, las animas, los zorros oscuros, los gatos de dos colas, todos ellos son espíritus, todos ellos tienen olor, aunque no te dejes llevar por sus nombres, no huelen a lo que deberían. -Luego de decir aquello una pequeña cortina de humo se formó entre ella y la chica, pero lo que apareció después de que el humo se disipó fue simplemente un cuerpo reflejo, el mismo rostro de la chica rubia, el mismo cabello, el mismo cuerpo, la misma estatura, probablemente no el mismo peso porque Haruka nunca había sido muy buena para adivinar eso y una diferencia notable, unos ojos de color púrpura.

- Hola. -Volvió a saludar por respeto, después de todo estaba usando el cuerpo de la chica sin permiso.- Dijiste algo de que lo humano no se aplicaba a ti, eso es interesante ¿Qué eres? -Sonrió ampliamente sin despegar su mirada de los ojos claros de la chica.- Como podrás ver yo soy un cambiaformas ¿También eres un cambiaformas? -Era una pregunta honesta, a decir verdad realmente esperaba que se tratara de alguna clase de cambiante, cualquier clase, mientras no fuera un vampiro, un demonio o un humano estaba bien por Hakura.

La escuché con cuidado mientras enumeraba los espíritus, así que probablemente era uno de ellos. La cuestión era averiguar cual. Empecé a considerarlo cuando una cortina de humo apareció frente a mi. No estaba segura de qué criatura era pero el humo no me impresionaba al menos. Di un paso atrás al verme reflejada al otro lado del humo, bueno con excepción de los ojos purpura y realmente no recordaba que el vestido me quedara así en la mañana.

Di un paso para acercarme y examinar a la chica cuando empezó a hablar, asentí cuando dije hola y le regresé el saludo al tiempo que cerraba un poco más el espacio. No olía como yo al menos. Crucé los brazos al empezar a responderle. -Hola, sí podría decirse que soy cambiaformas. Aunque no puedo copiar la apariencia de alguien más. ¿Eres un zorro acaso?- Decirle que era una zorra posiblemente se malinterpretaría, así que preferí el adjetivo masculino.

Sin darle mucho tiempo para reaccionar estiré la mano y le agarré el pecho presionando ligeramente. -Al menos creo que eres una chica, un hombre no le sacaría la sensación adecuada. Sería incómodo que un hombre adoptara mi forma.- Dio un saltito hacia atrás esperando no haber molestado a la chica, incomodarla sí, pero no molestarla. Había escuchado que algunas habilidades se debilitaban si el usuario se desconcentraba.

De momento le picaba más la curiosidad que el pensamiento de que podría ser potencialmente peligrosa. Así que esperó una respuesta a su pregunta, quizás tendría que probar uno por uno con los espíritus que le había mencionado antes. Volvió a cruzarse de brazos y ladeó la cabeza ligeramente. -Bueno, te puedo decir que este es mi aspecto usual.-